Lo primero que dedemos mencionar es que el hormigón nunca se utiliza solo, si no que siempre debe ir armado para mejorar su comportamiento a tracción.
Si comparamos el espesor de hormigón que se necesita para obtener el mismo aislamiento que con el panel sándwich de poliuretano, observaremos que no se puede utilizar el hormigón como aislante térmico.
Por otra parte, los paneles sándwich de poliuretano permiten una construcción más ligera y rápida y por lo tanto más económica que el hormigón. Además las juntas y sistemas de fijación de los paneles de poliuretano están diseñados para mantener la estanqueidad y el aislamiento, por lo que a nivel sísmico el panel con caras metálicas, al ser más ligero, se comporta mejor que el hormigón qué es mucho más rígido.
La durabilidad de los paneles de poliuretano oscilan los 40 años. Gracias a la excelente resistencia química y biológica del poliuretano, su gran estabilidad incluso bajo condiciones especiales (temperaturas extremas, ambientes muy húmedos) y la gama de recubrimientos del acero (prepintados / galvanizados) que se adaptan a cualquier condición ambiental, los paneles de poliuretano pueden ofrecer la mejor garantía de durabilidad.
